"Quién hubiera dicho que estos poemas de otros iban a ser míos, después de todo hay hombres que no fui y sin embargo quise ser, si no por una vida al menos por un rato..." Mario Benedetti.
A los amantes de los árboles,... localización, poesía, cuentos/leyendas, etc.
11/24/2014
ÁRBOLES CON MÁS BIOMASA
Gracias a la biotecnología, investigadores de la Universidad
Politécnica de Madrid han logrado aumentar la producción en
especies leñosas, lo que tiene un gran interés para el mercado
energético.
Mediante la modificación de la expresión de genes responsables
del desarrollo de ramas en el primer año de vida de las especies
leñosas, investigadores del Centro de Biotecnología y Genómica de
Plantas (CBGP
UPM-INIA), centro mixto de la Universidad Politécnica de Madrid
(UPM) y el Instituto
Nacional de Investigaciones Agrarias (INIA), han demostrado que es
posible aumentar la producción de biomasa de una plantación
forestal, todo ello sin alterar las características de crecimiento
ni la composición o anatomía de la madera. Estos resultados tienen
un alto valor comercial para el mercado bioenergético y ya han sido
protegidos mediante patente.
Plantación de chopos / Antonio Gil
Las yemas laterales de la mayoría de las especies leñosas de
zonas templadas y frías no brotan durante la temporada en la que se
forman. Estas yemas, denominadas prolépticas, permanecen latentes y
no crecen hasta la primavera siguiente.
Sin embargo, en el álamo y algunas otras especies de salicáceas,
así como en muchas especies tropicales, algunas yemas laterales
brotan silépticamente, es decir, crecen durante la misma temporada
en la que se forman.
De esta manera, la ramificación siléptica es capaz de aumentar
el número de ramas, el área foliar y en general el crecimiento del
árbol, en especial en sus primeros años.
Con esta base, investigadores de la UPM han utilizado un
procedimiento biotecnológico para modificar los niveles de expresión
del gen RAV1 (Related to ABI3 and Viviparous 1) que
incrementa el desarrollo de ramas silépticas en especies leñosas.
Así, los investigadores han conseguido aumentar la producción de
biomasa de una plantación de chopo.
Este procedimiento de modificación genética, es potencialmente
aplicable a cualquier especie leñosa y por tanto permite aprovechar
las características adaptativas de dicha especie a un determinado
hábitat.
Estos resultados tienen un gran interés para el mercado
energético. En la medida en que se aseguren rendimientos de
producción sostenibles de biomasa de especies leñosas, que no
afecta a la demanda de alimentos, podrán mitigarse los efectos del
calentamiento global así como mejorar la seguridad energética.
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11/21/2014
¿VALE LA PENA SALVAR NUESTROS BOSQUES? Diario LEVANTE - 21.11.2014 - Juan Ponce...
¿Vale la pena salvar nuestros bosques? Así, a bote pronto, pocos dirían
que no, aunque no faltaría quien introdujera un depende. A esa duda se
aferra el gobierno valenciano de Alberto Fabra, la consellera Bonig y
algunos de sus alcaldes, para no realizar las inversiones necesarias
para hacerlo. "Depende de lo que cueste", dicen, y aseguran que el
precio por garantizar la vida de nuestra masa forestal, que rondaría los
30 millones de euros, es caro.
La prensa lleva tiempo alertando
de que 300.000 hectáreas de pinares están amenazadas por diversas
plagas, pero no es solo una amenaza. Cualquiera que haya visitado
nuestros bosques en los últimos meses habrá visto extensiones crecientes
de pinar que se secan, que se mueren, y es debido a estas plagas
favorecidas por una sequía intensa y sin precedentes. Y no hay
precedentes porque, aunque en nuestro clima las sequías son normales, el
cambio climático global las está haciendo que sean cada vez más
intensas.
¿Pero qué nos ofrecen estas formaciones vegetales?
¿Sacamos algún rendimiento que compense esos 30 millones? La respuesta,
por extraño que parezca a los señores del PP, es bastante sencilla. Solo
en territorio valenciano tenemos 1,3 millones de hectáreas de montes,
la mitad de ellos poblados con una cubierta arbórea de pinos bajo la
cual hay formaciones arbustivas diversas. Y aunque las cifras estimadas
son dispares, los expertos coinciden en que una hectárea de bosque
valenciano genera entre 500 y 5.000 euros al año en servicios
ambientales según su calidad. Podemos afirmar pues, que de promedio cada
hectárea genera al año al menos 1.000 €. ¿Y cómo se mide la
calidad del bosque?
Pues en función de su capacidad de prestar esos
servicios ambientales, que básicamente son la producción del oxígeno que
respiramos y la captación del CO2 que emiten el tráfico, las calderas y
las industrias y que está generando el cambio climático. Y no solo eso.
También tienen un papel fundamental en la regulación local del clima
atrayendo las lluvias. Cuanto más denso sea el bosque más las atrae, y
al mismo tiempo tiene mayor capacidad de retener el agua caída del
cielo, lo cual previene inundaciones en zonas costeras y además recarga
los acuíferos subterráneos. Los expertos también coinciden en que el
principal riesgo de nuestras montañas es su erosión o pérdida de suelo
fértil, ya que el suelo es el soporte del bosque y si se pierde el
bosque es irrecuperable.
Además, los bosques mejoran la calidad
paisajística, mantienen nuestra biodiversidad y ofrecen espacios de ocio
cada vez más solicitados por un turismo rural en auge.
Todo ello
valorado en al menos 1.000 euros al año por hectárea, de lo que podemos
deducir que las 300.000 hectáreas amenazadas nos dan 300 millones de
euros al año en servicios ambientales.
Si a eso se le suma que el
plan de choque propuesto por Compromís no solo trata de frenar la plaga
que afecta a nuestros bosques, sino que también afecta a la del paro
(pues crearía unos 1.500 puestos de trabajo en 2015 en los 100
municipios afectados), resulta obvio que no hablamos de un gasto, sino
de una inversión. ¿Seguro que no nos podemos permitir salvar nuestros
bosques, señora Bonig?
Arbolapp es un aplicación gratuita basada en la investigación del Real Jardín Botánico del CSIC que te ayudará a identificar los árboles silvestres de la Península Ibérica y las Islas Baleares, financiada por la Fundación Española para la
Ciencia y la Tecnología (FECYT). Parece una imitación del programa americano "leafsnap" pero sea bienvenido.
¡Descárgatela y disfruta de la naturaleza y de la ciencia!
A la hora de encontrar el árbol buscado, la app
muestra curiosidades de la especie como que 'La Gioconda' está pintada
sobre una tabla de álamo. También, que los frutos del madroño
contienen alcohol y su consumo excesivo puede provocar borrachera o
que en el Antiguo Egipto se usaban los frutos del almendro para
ajusticiar a los criminales.
Arbolapp incluye:
> 118 especies: todos los árboles autóctonos
y los más frecuentemente asilvestrados en Andorra, Portugal
continental, España peninsular y las Islas Baleares. Cada especie cuenta
con un mapa de distribución, una breve descripción y una o varias
fotografías.
> 2 tipos de búsqueda (guiada y abierta) entre las que el usuario puede elegir libremente para identificar especies de manera intuitiva.
> Más de 300 ilustraciones que facilitan la identificación de especies.
> Cerca de 400 fotografías con los detalles más característicos de cada especie.
> Un glosario con más de 80 términos.
Los
contenidos están orientados a todas aquellas personas que deseen
iniciarse o profundizar en el conocimiento de los árboles de su entorno.
Por ello, se ha hecho un esfuerzo por utilizar un lenguaje asequible y
explicaciones sencillas sin abandonar el rigor científico.
Arbolapp funciona de manera autónoma sin conexión a internet, por lo que es de gran utilidad en excursiones a la naturaleza.
¿Dónde
podremos utilizarlo?
Arbolapp funciona de manera autónoma sin conexión a internet, por lo que
podremos utilizarlo en cualquier excursión a la naturaleza dentro de la
Península Ibérica y las Islas Baleares.
Las explicaciones, sin abandonar el rigor científico, están hechas en un
lenguaje asequible, de modo que pueda ser útil para toda persona que quiera iniciarse
o profundizar en el conocimiento de los árboles de su entorno.
Dicho esto, poco más hay que añadir, porque al descargarla podremos
empezar a aprender, a descubrir y, lo que es más importante a conocer mejor
nuestros árboles. Cada vez más cerca de ellos. Cada vez más amigos. Recurso didáctico en las aulas
El
coordinador del proyecto, Eduardo Actis, ha incidido en que esta app
es "una buena herramienta para que el ciudadano de a pie pueda
adquirir conocimientos de botánica de forma entretenida". "Lo
interesante es que una experiencia lúdica, como es pasear por un
bosque, se pueda transformar en aprendizaje, aunque creemos que
también puede ser un recurso didáctico en las aulas", ha señalado.
En este sentido, la vicepresidenta adjunta de Cultura Científica del
CSIC y responsable del proyecto, Pilar Tigeras, ha afirmado que el
objetivo del proyecto es "trasladar a la ciudadanía el conocimiento
científico, a partir de una experiencia que está al alcance de
cualquiera". Además, Tigeras destaca que "la integración de las TIC y
la búsqueda de nuevos formatos es una apuesta del CSIC a la hora de
divulgar la ciencia".
Durante la elaboración de Arbolapp, que comenzó el pasado febrero, un equipo multidisciplinar ha intervenido en
todo el proceso: desde la selección de las especies, hasta la toma de
fotografías, la elaboración de los textos y el desarrollo de la línea
gráfica. El biólogo y educador ambiental Felipe Castilla ha sido el
responsable de los contenidos.
El lugar idóneo para utilizar la aplicación es el medio natural.
"Al centrarse en árboles silvestres, es decir, que crecen
espontáneamente sin intervención humana, Arbolapp no incluye especies
que solo se encuentran en parques, jardines, calles o terrenos
forestales", comenta María Bellet, de la Unidad de Cultura Científica
del RJB.
Los creadores de la aplicación
apuntan que, con el objetivo de llegar a un público lo más amplio
posible, la app está disponible en Google play y App Store tanto en
castellano como en inglés. Asimismo cuenta con una página web
('www.arbolapp.es') con más información sobre su uso y contenidos.
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11/18/2014
LOS AMANTES ÁRBOLES
Publicado para el Concurso: “Colunga Mágica", de Teresa y Víctor (COMPLETO)
fragmento
(...) Sólo entonces me di cuenta que no era un solo árbol, sino dos, cuyas
ramas se entrelazaban, se retorcían las unas contra las otras como si de
dos amantes se tratase, unas veces con amor, otras con odio feroz,
causando la sensación de algo unificado, compacto que producía en quien
lo miraba una sensación de asfixia. -¿Ellos sueñan?- Miré al Nuberu con incredulidad. -Sí -me dijo- -Pero si sueñan, sin duda tú los has despertado al colgar en ellos mi ropa. -Ya estaban despiertos cuando colgué allí tu vestido- Replicó el Nuberu-
Pero fueron ellos los que me pidieron que lo hiciera. Podría haberlo
colgado en cualquier otro lugar. ¡Vamos!- dijo-Te contaré una historia. Y acariciando con suavidad la superficie rugosa del tronco de los
árboles, el Nuberu no paró de hablar y de hablar con los ojos cerrados
como si ese gesto le trasladase a una época remota.
Resulta- Empezó a decir- que hace mucho tiempo, vivieron aquí dos clanes que se odiaban a muerte.
Ese campo de lavanda en el que tú te has tendido hace unos instantes,
fue testigo de una gran batalla. Entonces, no había ninguna flor por
aquella época y la tierra se nutría de la sangre de los guerreros cuyos
cadáveres de uno y otro bando habían quedado abandonados sin derecho a
enterramiento. Este lugar se consideraba maldito por alguna razón para ellos. Bueno-
Dijo el Nuberu sonriendo- en realidad si sé por qué les asustaba tanto.
La razón éramos nosotros, los espíritus del bosque. Sucedió que el jefe de uno de los clanes al regresar de la batalla y
contar las bajas y los supervivientes de sus hombres, descubrió que le
faltaba uno: El más importante, su hijo.
Muerto de dolor y rabia regresó a este lugar en busca de su Lugo, su vástago pero resultó que se había hecho de noche. Los espíritus nocturnos del bosque se habían despertado y con sus
gritos, ahuyentaron a las tropas que no pararon de azuzar a sus caballos
hasta que se encontraron muy lejos del páramo. Muchos de ellos enloquecieron… Asustados los otros, juraron que no volverían a poner un solo pie en el
campo de aquella matanza pues los espíritus de los muertos pululaban por
allí adueñándose de todas las almas que encontraban a su paso. Ante el
miedo de aquellos sus aguerridos guerreros, el padre, no tuvo más
remedio que claudicar y resignarse a la muerte de Lugo, su hijo pequeño. Pero el padre tenía otros dos hijos más que le sucedieran a su muerte
por lo que la muerte de Lugo tampoco era un mal tan irreparable… No muy lejos de allí, en una aldea vecina, una dama de hermosos ojos
azules, casi violetas, hija del cabecilla del clan contrario, dirigía
sus pasos hacia este lugar. La joven rebelde cuyo nombre era Daanan, en honor a una diosa
protectora, contradijo las órdenes de su padre que insistía que en aquel
lugar en el que habían muerto tantos de los suyos y muchos de sus
odiados enemigos, estaba impregnado de una oculta maldad a la que no
quería ver expuesta a su propia hija. Habían trascurrido apenas dos días desde la mortal batalla y sin
embargo, las leyendas sobre lo que allí acontecía por las noches ya
campaban por todas partes. Daanan, quería ir a bañarse en el río, como acostumbraba a hacer y no
quería perder la costumbre a pesar de todo lo que había ocurrido. Había ya anochecido cuando se dio un baño en las frías aguas del río bañadas por la pálida luz de la luna. Se quedó un instante quieta antes de salir, escuchando embelesada el canto de las lechuzas y los grillos. Cuando finalmente se decidió a salir era aún más de noche. Daanan no
tenía miedo al bosque, al que debía volver para llegar a su poblado tras
atravesar el campo y el río. Era una chica valiente a la que ni
siquiera los aullidos de los lobos conseguían amedrentarle pero la idea
de pasar entre todos aquellos cadáveres no le resultaba en absoluto
divertida. Se puso el vestido con rapidez y caminó por el campo sembrado de
muertos intentando no pisarlos ni mirar abajo por temor a reconocer
algún rostro entre ellos. Se disponía a dar un último paso cuando sintió que una mano aferraba su tobillo lo que le hizo proferir un grito de terror. -¡Ayuda!- Sintió una voz débil que provenía desde abajo. Ante ella se arrastraba un hombre joven, apuesto, gravemente herido por una lanza bajo el costado. La herida tenía muy mal aspecto. Daanan se arrodilló ante el joven y tomó su hermoso rostro entre sus
manos. Éste, finalmente, dejó caer hacia atrás su cabeza, palideció y
pareció que dejaba de respirar. Asustada, la joven, volvió a hundir sus
tobillos en las frías aguas del rio en dirección a la vegetación que
crecía cerca de la cascada. Tomó de allí cuantas hierbas necesitaba para curar al joven, las mezcló
con barro y agua del manantial y volvió a su encuentro a toda prisa. Le arrancó la lanza, limpió la herida y cubrió el agujero que había
dejado el arma sobre las costillas del joven con el emplaste que había
fabricado a base de agua, barro y plantas medicinales. Luego, le alejó de todos aquellos cadáveres, vigiló su fiebre y
le habló continuamente para evitar que el joven Lugh acabase
durmiéndose. Cuentan que la bella Danaan acudía a escondidas al encuentro de su
amado día tras día. Robaba alimentos del poblado y también medicinas. Su amor por el enemigo de su padre era tan grande que ya no le importaba lo que pudiera ocurrir si éste llegaba a enterarse. Y la suerte no acompañó a los enamorados. Receloso por el extraño comportamiento de su hija, el caudillo, se hizo
acompañar de uno de sus mejores hombres y al abrigo de la noche
sorprendieron con estupor a la muchacha que besaba con ternura al hijo
de su peor enemigo y lo que era aún peor curaba sus heridas y le proveía
de alimentos.. Ya no había marcha atrás. De haber estado solo, el caudillo tal vez habría hecho la vista gorda
ignorando tan grande traición. Pero había un testigo. Y su hija y el
hijo de su enemigo debían tener un escarmiento público. Los quemaron juntos en este mismo lugar, cerca del río. Cuentan, que compadecidos por tanto amor, los espíritus del bosque
sembraron estos campos con la flor de lavanda en recuerdo a la hermosura
de los ojos de ella y que con las cenizas de sus cuerpos abonaron la
tierra en la que crecieron dos árboles que los representan.
Dos árboles que se complementan el uno, al otro, que se abrazan, que se
retuercen, cuyas raíces se hunden fuertemente en la tierra y miran
siempre hacia el cielo. Si te fijas querida Silvia- dijo el Nuberu finalmente abriendo los ojos- podrás ver como sus ramas dibujan la suavidad y belleza de dos rostros
que se miran embelesados. -Es una historia muy hermosa- dije mirando los árboles y comprobando efectivamente lo que el Nuberu me decía. Permanecí allí con él mirando los árboles, acariciando como el Nuberu la superficie rugosa de sus troncos. Así se hizo de noche. (...)