01 abril 2020

Los puentes de Meghalaya

NATHALIE GEORGES
Los puentes vivientes de Meghalaya, India
 
Hace más de quinientos años, en el estado indio de Meghalaya, los habitantes comenzaron a construir puentes con raíces de árboles. Los llamados "puentes vivientes" o "puentes raíz" son indispensables para la población local.

Francia, 2019, 25 min.
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30 marzo 2020

El quejigo de la Casa de la Vega

EL QUEJIGO DE LA CASA DE LA VEGA
de https://natucomayud.blogspot.com/
     (...)  La Casa de la Vega era una finca particular dentro del término municipal de Embid de Ariza (Zaragoza) en la que se cultivaban viñedos y árboles frutales. En esta propiedad se sitúa uno de los árboles centenarios más destacados de de la comarca. Su antigüedad es tal que ya aparece citado por el cronista de Fernando el Católico al que le llamó la atención el extraordinario tamaño que ya por entonces tenía el roble. Este majestuoso ejemplar también está catalogado como árbol singular gracias a su belleza y a su tamaño, pues mide 23 m de altura y el perímetro de la base de su tronco es de 6 m.    Perímetro del tronco a los 1,3 m de altura: 5,88 m. Altura total: 26 m. Diámetro de la copa: 38 m.
      El roble o quejigo de La Casa de la Vega es un excepcional ejemplar de la especie Quercus faginea. También conocido como “roble carrasqueño” o “roble valenciano”, su distribución se ciñe exclusivamente a la Península Ibérica y el Norte de África.
    Se trata de una especie que puede superar los 20 m de altura, cuyas hojas son marcescentes, esto es, permanecen en el árbol sin caerse durante el otoño e invierno, para así ser menos atractivos para la fauna y resguardarse del frío, las heladas y el estrés hídrico.



Un árbol con historia
      Esta finca agrícola privada recibe el nombre de La Casa de la Vega, tras la que se esconde una intensa historia rodeada de cierto halo de leyenda. En este texto del siglo XIX aparece detallada:
“A medio hora del pueblo, se halla situada la granja agrícola, titulada Casa de la Vega. Tiene seis vecinos y una pequeña Iglesia […] Está situada esta posesión entre hermosos arbolados, viñedo y árboles frutales, comprendiendo también tierras de regadío, montes de chaparro y romero. Se ignora su antigüedad, pero como se sabe que era sitio Real de Doña Juana la Loca, hija de los reyes Católicos, la cual se venía a esta granja a pasar muchas temporadas después de la muerte de su esposo D. Felipe el Hermoso […] sería fundada por los años de 1507, porque Felipe el Hermoso, comenzó a reinar en 1506, y murió antes de finar el año. Todo esto hizo que se extraviase más la razón de la desgraciada Reina, y al reconocer su incapacidad para reinar las Cortes de Castilla, fundarían, para distraerla, la granja que nos ocupa.”


Nomenclátor descriptivo, Geográfico y Estadístico de los pueblos del Obispado de Sigüenza (1886).

Paseo de plataneros que nos lleva hasta el quejigo.
     Para visitarlo hemos de tomar la A-2501 y 4 km. antes de llegar a Embid de Ariza encontraremos el caserío y un cartel indicador del roble. Podemos dejar el vehículo en esta zona y seguir sobre el barranco de la Corregidora junto a una hilera de antiguos chopos cabeceros hasta llegar al río Henar; cruzaremos sobre un inestable tablón, por lo que es recomendable llevar un bastón para asegurarse el paso o llevar unas botas de goma que es lo que yo hice. Tras vadear el río seguimos por una atractiva pista bordeada a ambos lados por magníficos plataneros de sombra para, enseguida, llegar al quejigo que, sin duda, nos sorprenderá.
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Imagen de 1976

28 marzo 2020

Libros: Dibujar un árbol

BRUNO MUNARI
Dibujar un árbol

"Dibujar un árbol" es uno de los libros más conocidos del artista italiano Bruno Munari. Expresado con claridad, simplicidad y humor, Munari nos cuenta cómo son los árboles y de esta manera cómo dibujarlos. ANTI lo edita en castellano por primera vez. 

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26 marzo 2020

JACQUES TASSIN
Pensar como un árbol

Los árboles como nunca te los habían explicado y lo que podemos aprender de ellos

      Desde hace algunos años, en la estela de importantes descubrimientos científicos relacionados con la comunicación vegetal, una fuerte tendencia nos incita a tomar el árbol como modelo, incluso a penetrar los arcanos de su «vida secreta». Pero más allá de las metáforas y las analogías fáciles, ¿qué podemos esperar de este nuevo acercamiento a los árboles? ¿Una fuente de inspiración, un modelo ecológico, la llave para un nuevo bienestar basado en la apertura y en el compartir? Un ecologista apasionado nos entrega sus respuestas marcadas por la ciencia, la sabiduría y un respeto infinito por la naturaleza:
     «[El árbol] es una gran figura de lo vivo que parece querer dirigirse a los grandes primates irreverentes en los que nos hemos convertido. Unos primates hoy frenados en su impulso, aplastados por incertidumbres, perdidos en el borde del camino por haber tontamente olvidado que vivían en el planeta de los árboles.»

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Aquí la reflexión de César-Javier Palacios sobre este libro...

     Por qué los árboles orientan nuestra vida y cómo podríamos inspirarnos en ellos. Con una idea tan ambiciosa, Jacques Tassin, investigador en ecología vegetal en el CIRAD (Centro de Cooperación Internacional en Investigación Agronómica para el Desarrollo), experto en estudiar el vínculo entre el hombre y las plantas, acaba de publicar Pensar como un árbol (Plataforma Editorial, 2019). Un libro sencillo pero inspirador que nos invita a reconectar con la naturaleza.
     Según el filósofo Robert Dumas, “no hemos abandonado el árbol” y este tiene todavía mucho que enseñarnos. Decía también Antón Chéjov que los bosques “enseñan al hombre a comprender la belleza y le inspiran sentimientos elevados”.
     Evolucionar sobre los árboles deja rastros, los de nuestro pasado arborícola y simiesco. Y eso se nota. Como destaca Jacques Tasin en su libro, “hemos sido modelados por los árboles”. Y de ellos, de su contacto, nos llega el sosiego, el aprendizaje y hasta la sanación. Los baños de bosque nos curan. Desde hace unos treinta años, los psicólogos notan una correlación clara entre la presencia de árboles a nuestro alrededor y nuestra capacidad para sentirnos a gusto con nosotros mismos.
     De los árboles podemos aprender muchas cosas que nos vendrían de maravilla en estos tiempos locos y apresurados: lentitud, sobriedad, mixtura, sensibilidad. De ellos nos llega la música de sus ramas y hojas, la fluidez y la armonía, la belleza y el color. Son incluso un modelo del desarrollo sostenible, los reyes de la economía circular y del reciclaje (aunque no de la reutilización, pues la hoja caída al suelo se descompone pero no volverá a ser hoja), limpiadores de la atmósfera y las aguas, generadores de suelos fértiles, de madera y energía, de oxígeno y vida.
     Desde hace unos años, en la estela de importantes descubrimientos científicos relacionados con la comunicación vegetal, una fuerte tendencia nos incita a tomar el árbol como modelo, incluso a penetrar los arcanos de su “vida secreta”.
     Pero más allá de las metáforas y de las analogías fáciles, ¿qué podemos esperar de este nuevo acercamiento al árbol? ¿Una fuente de inspiración, un modelo ecológico, la llave para un nuevo bienestar basado en la apertura y en compartir?
     Tasin, ecologista apasionado, nos ofrece en este libro sus respuestas marcadas por la ciencia, la sabiduría y un respeto infinito por el árbol:
“Parece que el árbol quiere dirigirse a los grandes primates irreverentes en los que hemos convertido. Primates hoy perdidos en el borde del camino por haber tontamente olvidado que vivían sobre el planeta de los árboles”.
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Ficha técnica: Título: Pensar como un árbol     Autor: Jacques Tassin      Editorial: Plataforma Editorial      Fecha de la edición: 2019      Lugar de la edición: Barcelona     Colección: Plataforma Actual      Encuadernación: Tapa blanda con solapas     Páginas: 161     Precio: 17 euros
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