sábado, 6 de junio de 2015

SAQUEAMOS EL MAR
Día 8 de Junio, Día de los OCÉANOS

El título puede sonar catastrófico: el océano es enorme como para que se pueda esquilmar o vaciar. Su capacidad de regeneración es enorme y basta con tomar medidas concretas y disminuir el ritmo de capturas para que todo sea como fue al menos, unos años antes, y se pueda seguir con la misma actividad. Pero el mercado no funciona así: no tolera bien eso de tener altibajos en su tasa productiva, en los precios. La demanda creciente debe de ser satisfecha. Es raro el sitio donde las pescaderías no están llenas, ya sea con peces de temporada locales o con peces traídos del otro lado del mundo. Y esto puede dar la imagen de que, más o menos, el mar siempre está en las mismas condiciones en cuanto a disponibilidad de capturas. Pero otra vez nos cegaría la resplandeciente abundancia si no viéramos a qué se debe el poder tener siempre pescado a mano. Para que vean datos sobre la explotación que se ejerce sobre las criaturas marinas, sean o no comerciales, les recomiendo este artículo de la ONG Oceans Entry.
 
http://www.oceansentry.org/lang-es/sobrepesca/campana.html

También este artículo sobre la historia de la caza de ballenas, que fueron los primeros objetivos de nuestro saqueo por su gran tamaño y facilidad de captura a partir de la Revolución Industrial, sobretodo.
 
http://islandia.foroactivo.com/t134-historia-de-la-caza-de-ballenas

      Como cuenta el primer artículo, el hecho de mantener la demanda mundial de pescado sea para alimento humano o para las piscifactorías (o harina de pescado para ganado), exige el desarrollo de técnicas cada vez más punteras y agresivas, con menor discriminación entre su objetivo y el resto del ecosistema. La misma existencia de estas técnicas agresivas me parece prueba suficiente de que eso es cierto. La industria pesquera se ha nutrido, y mucho, de la industria militar, tanto que se puede decir que estamos librando una verdadera guerra contra las criaturas marinas. Y se ha nutrido de su eficacia para encontrar, localizar y capturar: utiliza sonar, GPS, helicópteros y avionetas, detección por satélite… Ningún banco de peces podría escapar, ya se encuentre cerca de la superficie o a 1.000 metros. Al mismo tiempo, su capacidad de almacenamiento es mayor que nunca y gracias a los buques nodriza, pueden conservar el pescado durante mucho tiempo hasta que llegan a puerto, congelado, lo que aumenta su eficacia al disponer de mucho más tiempo para su función. ¿Por qué iban a necesitar semejante tecnología si el mar rebosara de vida? ¿Solo por la elevada demanda? Hay que ver las cosas más allá de como las vería un puro economista haciendo un informe al respecto.
      Lo que está claro es que no solo la mayoría especies comerciales han reducido bruscamente su número, algunas hasta niveles preocupantes, sino que todos los ecosistemas marinos se degradan, ya sean bosques submarinos (quelpos, fanerógamas marinas…) arrecifes de coral (el famoso blanqueamiento achacado al calentamiento global, pero que se debe en realidad a otros motivos) las plataformas continentales (entre 0 y 300 metros de profundidad, dependiendo de cómo de abrupta sea la pendiente desde la costa), que es donde más se pesca y donde se emplea la agresiva técnica de la pesca de arrastre, pero también los grandes bancos pelágicos, los grandes predadores como el atún, el bacalao, el pez espada, el marlín, los tiburones… están disminuyendo sus poblaciones, así como las de sus presas, peces de menor tamaño sean pelágicos (de mar abierto) o de fondo.



      No todo es el apocalipsis. Claramente se ve que en áreas donde se detiene esta explotación la vida en el océano consigue recuperarse. Pero lamentablemente, el mar es territorio sin ley, prácticamente. La explotación es muy superior a la que ocurre en el medio terrestre. Localmente, aún quedan zonas del océano que no son explotadas con ecosistemas desarrollados. Además, se ha comprobado que el abandono de las técnicas agresivas de pesca industrial como el arrastre, la retropesca o el cerco, permiten que la producción aumente, de modo que es simplemente respetar el equilibrio. El problema es hasta qué punto vamos a llegar en esto de la sobrepesca, ya que cuanto más se profundiza en esa herida, más larga será la curación, o tal vez tenga consecuencias irreversibles. La cosa está en que la sobrepesca es solo una de las formas en que perjudicamos a los océanos, la más directa. La contaminación y la creación de zonas muertas es un problema en las zonas costeras. Cuando estas reciben agua cargada de nutrientes, fertilizantes o sustancias orgánicas de desechos desde nuestras zonas urbanas, campos, vertidos de petróleo o determinados metales o químicos, las algas y el plankton lo aprovechan y su número crece. Al final agotan el oxígeno y crecen tanto que impiden el paso de la luz bajo la capa superficial. Esto acaba matando todo lo que vive en la zona, salvo una capa de microorganismos y algas planktónicas (a la deriva) que puede traer muchos problemas (toxinas, enfermedades…), al mismo tiempo que se genera sulfuro de hidrógeno. Cada año se forma una zona muerta de más de 17.000 Km. cuadrados de área en el Golfo de México, al parecer la más grande del planeta. Pero el Mar Báltico o el Mar Negro son también conocidos por esto. Piensen que de todo el agua que emplean los humanos que viven en las grandes ciudades, así como el agua que se usa en agricultura en el mundo (más del 70% del agua dulce se usa en agricultura) más de la mitad termina en el mar. Esto incluye el agua que cada un@ gastamos diariamente.
 
      Igual, la ONG Oceana denuncia la degradación de los bosques submarinos, formaciones ya sea de grandes algas o de las llamadas “fanerogamas marinas” que son verdaderas plantas que se han adaptado para vivir en el mar, como la Posidonia oceanica, muy conocida en el Mediterráneo, y que es muy sensible a las condiciones de cristalinidad del agua.
 
 
      Respecto a los arrecifes de coral, se merecen una mención aparte. No solo son unos ecosistemas que rivalizan o superan a los bosques tropicales en la tierra, en cuanto al número de especies que dependen de ellos. Sino que se ponen como una de las pruebas visibles de como estamos cambiando terriblemente el clima. Al parecer, los corales blanquean porque pierden unas algas con las que mantienen una simbiosis (una relación entre dos especies en la que los dos se benefician). Las algas, que viven dentro de los corales (concretamente de los pólipos, que son el verdadero animal y de los que hay miles en cada coral) utilizan la luz y aportan azúcares y moléculas biológicas al coral, que normalmente viven en aguas de baja profundidad (someras) pobres en nutrientes y cristalinas. El coral proporciona el hábitat para el alga y lógicamente, está más protegida de predadores o filtradores. Al parecer estudios prueban que el aumento de la temperatura, aunque sea muy leve, implica que los corales expulsan en masa las zooxantelas (las algas) causando su muerte. Pero si uno investiga un poco, va a ver que las causas que afectan a los corales son muchas más.
      En primer lugar la contaminación. Los corales son muy sensibles a la turbidez del agua, precisamente por su requerimiento de luz solar. Esta contaminación pueden ser sustancias químicas o sedimentos que caen sobre ellos o “ensucian” el agua. La recuperación del coral puede ser bastante posterior a esto, de modo que eso podría explicar el blanqueamiento en algunas zonas. Pero también los corales tienen sus predadores. Algunos son muy voraces como el pez loro, que con sus picos córneos arrancan y tragan pedazos de coral para digerir los pólipos. El esqueleto de carbonato cálcico lo liberan como una arena, que para dar una idea, decir que algunas islas están hechas solo por la arena que defecan estos peces a lo largo de miles de años.
Estrellas de mar, Acanthaster planci (estrella “corona de espinas”).
     Según wikipedia: “Esta especie presenta una amplia distribución en la toda la región tropical indopacífica, desde el mar Rojo, pasando por el océano Índico, y hasta el océano Pacífico, frente a la costa de Panamá y la Isla Gorgona. Suele llegar encontrarse en gran número en las regiones coralinas.”
Eliminando a los predadores de esta estrella, precisamente mediante sobrepesca, aumentamos el número de coronas de espinas, lo que amenaza a los arrecifes (esta estrella de mar se alimenta solo de corales de arrecife). Y los grandes predadores han sido los primeros en ser víctimas de nuestro saqueo al mar.
Pero hay más: la pesca de arrastre es una de las principales causas de la destrucción de ecosistemas de plataforma o costeros, como los arrecifes o bosques submarinos. La recolección y el tráfico ilegal (o legal) de especies de corales, gorgonias etc… para los acuarios son otro de sus problemas.
En definitiva, que estamos saqueando el mar de una forma destructiva y no necesaria está más claro que el agua. Propongo este post para todo lo relacionado con este tema, la conservación del mar, cosas que podáis aportar, debatir si esto es muy exagerado o por contra, deberíamos deshacernos de consumir pescado…

      La basura que va al mar porque no podemos enterrarla ni quemarla, ha formado el mayor vertedero del mundo en un giro de corrientes del Pacífico Norte (hay otros depósitos menores en otros lugares del mar). Se le llama también continente de basura o sopa de plástico. Tamaño = 1.400.000 Km. cuadrados.
 
 
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